La llegada de la primavera y el buen tiempo nos conduce a comprobar las condiciones en las que se encuentra nuestra piscina y lo que necesitamos para realizar una puesta a punto y que esté en perfectas condiciones para cuando lleguen los días de más calor y queramos empezar a disfrutar de ella. Por tanto, debemos de tener en cuenta una serie de factores
Para que nuestra piscina esté preparada para poder hacer uso de ella es necesario realizar tareas de limpieza, rellenar de agua, aplicar tratamientos de regulación del PH para que se encuentre en óptimas condiciones y mantenimiento además de tener en cuenta la necesidad de hacer uso de buenos y específicos materiales para llevar a cabo estas tareas tanto si las realizamos nosotros como si las derivamos a profesionales
LIMPIEZA DE LA PISCINA
La limpieza de la piscina, como puede parecer lógico, es el primer paso a realizar. Para ello, lo mejor es vaciar la piscina y ya sin agua limpiarla y fregarla con un producto desincrustaste que aplicaremos utilizando un cepillo tanto en las paredes de la piscina como en el fondo. Se deja actuar unos minutos para que el producto haga su trabajo y después se aclarará con agua para arrastrar la suciedad. Cada producto tiene unas especificaciones y modos de uso que conviene conocer antes de llevar a cabo estas tareas, recomendamos leer las especificaciones y si tiene dudas en la aplicación o el modo de hacerlo lo mejor es consultarlo o que lo realicen profesionales como los que ponemos a su disposición en Piscinas España.
También es necesario limpiar los accesorios o componentes de la piscina como la depuradora o los skimmers que tienen que estar perfectamente limpios ya que se encargan de recoger el agua para su posterior filtrado.
LLENADO Y PREPARACIÓN DE LA PISCINA
Una vez que hemos procedido a la limpieza de la piscina podemos empezar a llenarla de nuevo con agua limpia a la que se deberá añadir cloro cuando el agua llegue más o menos hacia la mitad de la piscina. Después será necesario comprobar que los niveles de PH se encuentran en su valor óptimo entre 7,2 y 7,6 (información sobre PH). Si está demasiado alto corremos el riesgo de que aparezcan irritaciones en la piel y los ojos y que agua no presente el grado de desinfección necesario. Por el contrario, si está demasiado bajo se puede producir corrosión en los metales e irritaciones
TRATAMIENTOS PARA EL AGUA
El buen estado del agua tiene mucho que ver con su desinfección para ello, la aplicación de cloro resulta vital que debemos de aplicar en su medida justa que debe de estar entre 1 mg/l y 1,5 mg/l. Además, se puede usar cloro de desinfección rápida que limpie de microorganismos la piscina. También se debe añadir sal en una dosis recomendada de 3kg y 5kg por cada m2 de agua, aunque conviene ver las especificaciones que marca cada fabricante.
Si al limpiar la piscina descubrimos que han salido algas se deberán eliminar para evitar que las superficies presenten una coloración verdosa y lo que es más peligroso que donde aparezcan puede provocar que las superficies se vuelvan resbaladizas. Lo mejor para eliminarlas es aplicar un algicida como prevención. Lo puedes aplicar preparando una disolución en agua y vertiendo ésta en el perímetro de la piscina y se debe de distribuir de forma uniforme por toda la superficie.
La aplicación de este tipo de productos evita la aparición de las algas pero también previenen la aparición de bacterias y de hongos.
Estos son solo los primeros pasos que debemos de llevar a cabo para preparar la piscina pero lógicamente a lo largo del verano y del todos el año se deben de seguir manteniendo estas pautas para que su buen estado sea constante. Y no olvidar que para cada acción existen productos específicos que conviene conocer y saber administrar y si no es así derivar esta responsabilidad a empresas especializadas o a técnicos y profesionales formados para ello como los que dispone Piscinas España. Consúltanos
